miércoles, 24 de mayo de 2023

11


LA LUCHA Maradona vs Messi, que el primero azuza y el segundo evita, es la lucha de lo viejo contra lo nuevo, de una tradiciĂłn que se resiste a morir y una modernidad que no termina de nacer. Messi aĂșn no puede ganar esa lucha en Argentina porque existe un amplio sector del pĂșblico que jalea a Maradona no por su segundo gol ante Inglaterra, sino por el primero; no por su tĂ©cnica exquisita, sino por sus desplantes; no por su zurda prodigiosa, sino por su patriotismo macho y analfabeto. El fĂștbol que representa Maradona, el que Ă©l mismo se ha encargado de reivindicar, se asemeja a un coso romano o a una plaza de toros; el de Messi se acerca a la Ăłpera o el ballet. El fĂștbol de Maradona es agresivo y antagonista; el de Messi se civiliza y se hace cientĂ­fico. El fĂștbol de Maradona genera mĂĄs noticias fuera del campo; el de Messi se remite al cĂ©sped. El fĂștbol de Maradona se encierra en lo patriota, se condena a ser argentino; el fĂștbol de Messi, en cambio, no canta el himno argentino ni se entrega al nacionalismo catalĂĄn: el fĂștbol de Messi se basta como arte, se ofrece a todas las gentes, se abre al mundo.